ARTICULO PRIMERO.- Conformar, el Comité de Dirección de...
"Año de la lucha contra la corrupción y la impunidad”
Vox provocó un escándalo mayúsculo en julio pasado al defender su dirigente Rocío de Meer la expulsión de España de ocho millones de inmigrantes y sus hijos. El partido ultra dijo entonces que sus palabras habían sido manipuladas o malinterpretadas. Sin embargo, la formación que preside Santiago Abascal sigue deslizándose hacia una concepción étnica de la nacionalidad española. Su portavoz adjunto, José María Figaredo, negó este jueves la condición de españoles a 2,5 millones de conciudadanos nacidos fuera de España.
El clima de intensa polarización que domina el panorama político español se proyecta de modo inmediato en la composición del Tribunal Constitucional y, consecuentemente, en el ejercicio de la función de máximo garante de la Norma Suprema que le corresponde. La reciente sentencia que avala la constitucionalidad de la ley de amnistía no hace sino confirmar la creciente fractura interna que se viene constatando en el seno del Constitucional en los últimos años. La normalización de la referencia a progresistas y conservadores en relación con los magistrados del alto tribunal que se ha impuesto entre la clase política y en los medios de comunicación ofrece una evidente prueba sobre la politización que impera en dicho órgano. Una situación que se ha constatado regularmente con ocasión de la selección y nombramiento de sus 12 integrantes. En efecto, el ejercicio de la potestad encomendada a los distintos órganos competentes (Gobierno, Cámaras y Consejo General del Poder Judicial) evidencia una lógica colonizadora de signo partidista que, sin lugar a dudas, pone de manifiesto una indisimulada voluntad de captura del máximo intérprete de la Constitución.
“Con este discurso queda homologado, estandarizado y alentado el delirio”. De este modo podría haber finalizado Trump su intervención ante la Asamblea General de la ONU. Si usted, lector, lectora (puto genérico disfuncional) pretende ser Premio Nobel de Física, créaselo. No importa que en el fondo sepa que no tiene ni idea de la materia, que, por otra parte, jamás le interesó, lo fundamental es el tono y la desfachatez con la que sea capaz de proclamarlo (ayuda mucho disponer de unas cabezas nucleares para fulminar a quien no lo acepte, pero a veces basta con el control de la judicatura, o del ejército, o del FBI). Piense que tampoco Trump ha acabado con siete guerras. De hecho, es un cómplice necesario del genocidio que se está llevando a cabo en Gaza, además del ramal de la cloaca desde la que Putin dispara contra Europa.
Esta película ha despertado lógica expectación desde que existieron noticias de que Paul Thomas Anderson, el señor más mimado en la categoría de cine de autor que se realiza en Hollywood, lugar plagado de majaderías rentables, había rodado Una batalla tras otra. Al parecer, adaptaba una novela del sacralizado Thomas Pynchon y disponía en el reparto de Leonardo DiCaprio, Sean Penn y Benicio del Toro, tres actores con largo e inmaculado prestigio, a los que les sobra trabajo y que se supone pueden escoger los mejores personajes dentro de un cine que aspira a la trascendencia.
Una batalla tras otraDirección: Paul Thomas Anderson.
Intérpretes: Leonardo DiCaprio, Sean Penn, Benicio del Toro, Regina Hall, Teyana Taylor.
Género: tragicomedia. EE UU, 2025.
Duración: 201 minutos.
Estreno: 26 de septiembre.
La Asamblea General de la ONU, monopolizada por la masacre en Gaza, no solo está teniendo repercusiones internacionales muy claras, con Donald Trump y Benjamín Netanyahu cada vez más aislados en un mundo en el que 156 de 193 países ya reconocen a Palestina. También está provocando un movimiento de fondo en España. El discurso del rey Felipe VI en la ONU, en el que no habló de genocidio pero sí fue muy duro contra Israel y defendió el reconocimiento de Palestina, está moviendo el tablero en España y deja cada vez menos espacio al PP, que se ha visto obligado en las últimas semanas a endurecer poco a poco su posición, aunque eso está creando una clara brecha interna.
El jurado popular ha vuelto a colocarse bajo los focos tras la resolución dictada el martes por el magistrado Juan Carlos Peinado en el caso Begoña Gómez, donde comunicó que la línea de investigación que mantiene abierta por el delito de malversación contra la esposa del presidente será juzgada por este tipo de tribunal en el caso de que llegue a celebrarse una vista oral. La posibilidad de que la mujer de Pedro Sánchez acabe sentada ante nueve ciudadanos legos en Derecho, que difícilmente no tendrían una idea preconcebida sobre ella y su marido, ha reabierto el debate sobre esa figura. ¿Existen mecanismos para protegerse de los sesgos de sus componentes? ¿Debería modificarse el listado de delitos que enjuicia el jurado para excluir los más técnicos? ¿Debería, incluso, eliminarse esta institución?
Los primeros en llegar fueron los policías. Eran seis, dice una de las activistas que los vieron aproximarse mientras esperaban en la acera junto al septuagenario al que iban a desahuciar, Juan José Hernández. Este miraba apesadumbrado. 70 años a sus espaldas, un cáncer superado y una cicatriz en el pecho de una operación a corazón abierto. Aquella mañana del 21 de agosto de 2024 unas 15 personas acompañaban a Juan José. Eran muchas menos que en otras ocasiones a pesar de que por redes sociales habían difundido una convocatoria bajo el mismo lema de siempre, #JuanJoseSeQueda. Pero en esa fecha mucha gente se encontraba fuera de Madrid, explica la activista, Vanesa Fernández. Pocos minutos después se acercaron los dos miembros de la comisión judicial. Él, alto y calvo; ella, rubia con melena. Juan José subió a la quinta planta con los dos funcionarios, recogió sus “cuatro trapos” y, abatido, les entregó la llave. Todo duró un par de horas. Esa noche la pasó llorando en su viejo Volvo.
La propuesta para bajar las ratios de estudiantes por aula que el Ministerio de Educación presentó el martes a los sindicatos de enseñanza superó las expectativas que estos tenían, que eran muy bajas, hasta el punto de que habían comenzado los preparativos para iniciar movilizaciones de protesta. El planteamiento del Gobierno les sigue pareciendo tardío, limitado y “verde”. Pero creen, a la vez, que las líneas que Educación ha puesto sobre la mesa, y su disposición a negociarlas, pueden conducir a una mejora en las condiciones en las que se desarrollan las clases.
El asesinato de Matilde Muñoz en Indonesia acumula interrogantes sin responder. Dos hombres han sido arrestados acusados de matarla la madrugada del 1 al 2 de julio, para robarle unos 150 euros en efectivo que tenía en el bungalow en el que se alojaba, en la isla de Lombok. Se trata de un empleado del hotel y otro extrabajador, pero la familia ha pedido por carta a través de la embajada española que se investigue a dos empleados más del establecimiento. En su escrito, fechado el pasado 19 de septiembre, repasan las contradicciones e incongruencias, que concretan en 23 puntos y que basan en su propia investigación en los dos meses en los que Matilde estuvo desaparecida. También solicitan la adopción de “medidas cautelares urgentes”, como la detención de los dos trabajadores del hotel y el bloqueo de sus cuentas bancarias. La Embajada de España en Yakarta asegura que ha estado siguiendo este caso y su investigación desde el primer momento, y que ha llevado a cabo todas las gestiones necesarias ante las autoridades locales, a quienes se les ha trasladado las preocupaciones de la familia. También insiste en el contacto permanente con ellos, a quienes ha informado de cada avance y prestado asistencia consular.
Alberto Núñez Feijóo hizo el 27 de enero un anuncio solemne durante una visita a una residencia de mayores en Córdoba. El líder del PP proclamó que las comunidades autónomas gobernadas por su partido iban a impulsar un “calendario vacunal común” a partir de este mes de septiembre, cuyo primer objetivo iba a ser introducir en España la vacuna frente el virus respiratorio sincitial (VRS) para mayores y pacientes vulnerables mediante una compra conjunta de los fármacos.
Hong Kong es un centro financiero global con una de las gastronomías callejeras más reconocidas del mundo. Podría parecer complicado traer los sabores y el revuelo de los dai pai dong (los puestos de comida tradicionales de aquella metrópoli) a un barrio residencial de Murcia, uno de esos lugares tranquilos a los que el escritor Jorge Dioni llama la España de las piscinas; pero Lin Wu (29), se lo ha propuesto. Y lo está consiguiendo: en cuanto enciende las luces, el interior de Madre Tigre se convierte en un torbellino de comensales y pedidos, mientras afuera los curiosos se pegan al cristal y sienten que se han asomado a otro universo.
Madre TigreLa actriz británica Tilda Swinton (64 años) no desentonaría en un cuadro de Sandro Botticelli, el pintor italiano del Renacimiento, y ella misma dice que en los lienzos de ese periodo había mucha más gente con su aspecto. Con todo, su rostro es hoy uno de los más reconocibles del cine independiente, donde debutó en 1986 con la película Caravaggio, del británico Derek Jarman. Lleva cuatro décadas —y más de 90 películas— manteniendo lo que califica “una conversación” con las obras de autor, y afronta ahora uno de los proyectos más personales de su carrera. El Museo del Cine Eye, de Ámsterdam, le dedica, a partir de este domingo 28 de septiembre, una exposición que ha comisariado y es lo contrario de una retrospectiva al uso. Titulada Ongoing (En marcha), no es estática sino el resultado de la colaboración con cineastas, artistas y amigos personales. Con ellos ha creado obras nuevas para “un espectáculo”, que es como califica su experiencia neerlandesa, abierta hasta el 8 de febrero.
Ante un partido de fútbol, siempre hay alguien contrariado. Porque su equipo pierda, por supuesto. Pero incluso entre la afición que vaya ganando. Porque sus ídolos fallen algún pase, no rematen el resultado u otras miles de razones, tantas como tifosi hay en el estadio o frente a la pantalla. Tan encendidos debates se contagian a los videojuegos de balompié. Y un asunto especialmente parte en dos a los usuarios, cada bando fiel a su credo: realismo contra inmediatez. Unos sueñan con sufridas victorias por 1-0; otros palpitan por una chilena que selle la enésima goleada. Charlas, foros y redes sociales alimentan el eterno choque entre ambas visiones. Sin embargo, EA Sports FC 26, última entrega del título más famoso sobre el deporte más famoso, que sale a la venta hoy viernes, se ha propuesto una misión ambiciosa: contentarlos a todos. Y más ahora que van apareciendo aspirantes a su trono digital. El rey, pues, regresa con un golpe en la mesa. Para encender a los súbditos, y acallar a los rivales.
El debate del estado de la Comunidad Valenciana, celebrado esta semana, ha servido para comprobar hasta qué punto el presidente autonómico, Carlos Mazón, vive en un estado de negación respecto a su falta de credibilidad como gobernante por su incomparecencia el día en que 229 de sus vecinos fallecieron ahogados por una riada de la que su Gobierno no alertó a los ciudadanos. En cinco horas de discurso —más de siete en total contando las réplicas—, no encontró tiempo para explicar qué estaba haciendo en la tarde del 29 de octubre de 2024 mientras miles de personas desbordaban los teléfonos de emergencias pidiendo ayuda. Once meses después de la catástrofe, el mandatario popular confirma con su silencio que lo que fuese que estuviera haciendo aquella tarde le da más vergüenza que el esperpento en el que ha convertido su presidencia.
Después de la elección de Donald Trump como presidente en noviembre de 2024, la comunidad hispana en Estados Unidos se encuentra hoy en una época inquietante y sin precedentes. El Gobierno de Trump ha decidido atacar específicamente a las comunidades hispanas y discriminar a las familias basándose en el color de la piel. Estas redadas de estilo militar, con agentes enmascarados y sin identificación, separan a los niños de sus padres y van en contra de todo lo que representa Estados Unidos.
Desde mi condición de ciudadana y feminista me resulta harto difícil comprender la lógica del actual Ejecutivo en materia de igualdad. Son tantos los errores que ha cometido en este terreno que si alguien me dijera que tiene un enemigo infiltrado dedicado a dinamitar su acción de gobierno me lo creería. Pero la realidad no es tan peliculera y no hay que buscar razones ocultas a la debacle: es por demérito propio que tropieza una y otra vez con la misma, fundamental y delicada piedra. No le ha hecho falta la intervención de ningún opositor ni enemigo, solo se han dejado perder todo el capital feminista con el que llegó a La Moncloa.
Pedro Sánchez pactó su investidura en 2023 con negociaciones bilaterales entre fuerzas políticas dispares, acuerdos que fue encajando como un puzle pero que nunca configuraron un bloque homogéneo. El discurso de investidura del presidente no fue una hoja de ruta compartida por todos, que aceptaron dar luz verde a este Gobierno de coalición cada uno por sus razones particulares y un principio compartido: no querían cuentas con la ultraderecha. Con estos mimbres se ha ido construyendo la historia de esta legislatura, la del PSOE negociando con grupos que miran por el rabillo del ojo a su competidor más cercano, la del Congreso más fragmentado de la democracia y la que lleva dos años sin Presupuestos Generales del Estado. El Pleno de esta semana ha vuelto a confirmar la tendencia desde el arranque de curso: que todos van contra todos, sin respeto a las barreras de los bloques políticos, aunque ninguno quiera anticipo electoral.