ARTICULO PRIMERO.- Conformar, el Comité de Dirección de...
"Año de la lucha contra la corrupción y la impunidad”
El anuncio de que la Fiscalía Europea está investigando un presunto fraude en los fondos europeos en relación con la formación de jóvenes diplomáticos, caso que ha acabado con la detención e interrogatorio de la ex jefa de la diplomacia europea Federica Mogherini, ha coincidido con las negociaciones finales en la capital belga de una directiva europea para reforzar el combate contra la corrupción que colea desde 2023. La ironía no se le escapa a nadie en una Bruselas nuevamente sacudida por un escándalo —y ya van varios en pocos años— que, además, no podría haber llegado en peor momento para unas instituciones europeas más cuestionadas que nunca, tanto desde fuera como entre sus propias filas. Sobre todo por una extrema derecha cada vez más fuerte en todas las esferas de poder y que no ha dudado en usar el nuevo potencial caso para atacar al corazón de Europa.
Víctor Rojo y Ana Fuentes
Producción:Víctor Rojo y Ana Fuentes
Presenta:Ana Fuentes
Diseño de sonido:Nacho Taboada
Edición:Ana Ribera
Coordinación:José Juan Morales
Dirección:Ana Alonso
Sintonía:Jorge Magaz
Cuesta arriba para el salvavidas financiero que la UE había planeado con activos rusos congelados para evitar la quiebra de Ucrania. Bélgica, el país donde están bloqueados la gran mayoría de esos activos, se aferra a su oposición, mientras que el Banco Central Europeo (BCE) no cree tener mucho margen legal para convencer a los belgas. La Comisión Europea no renuncia todavía a la idea que más consenso entre los socios concita: dar a Ucrania 140.000 millones de euros en un préstamo sin intereses usando los fondos rusos. Sin embargo, se va abriendo camino otra solución de emergencia, un plan B que supondría pedir dinero a los mercados con la garantía de los Estados miembros, según detallan fuentes de Bruselas.
Youmna El Sayed vivía en Ciudad de Gaza con su marido y sus cuatro hijos cuando empezó la guerra en octubre de 2023. Como corresponsal de la cadena en inglés de Al Jazeera se dedicó a informar de los ataques de Hamás, primero, y de la posterior respuesta de Israel, que, más de dos años después, ha dejado casi 70.000 muertos palestinos. Sin periodistas extranjeros por el veto de Israel, su trabajo y el de otros reporteros locales permitió al mundo conocer lo que se vivía en Gaza. Cuando a finales de 2023 tuvo la posibilidad de salir, dudó. “Fue una decisión muy difícil para mí”, reflexionaba el 18 de noviembre en Barcelona, a donde acudió para participar en un acto en el Colegio de Periodistas para exigir que la prensa internacional pueda entrar en Gaza.
La Comisión Europea ya tiene “un primer borrador” de la nueva adenda al plan de recuperación que está negociando con el Gobierno español, según explican los portavoces oficiales del Ejecutivo comunitario. “Mantenemos un contacto constructivo con España sobre este asunto”, añaden. En estas negociaciones, el Ejecutivo ha informado a Bruselas de su renuncia a solicitar en torno al 75% de los créditos que le corresponden al programa español del fondo de recuperación, lo que supone reducir los créditos de los algo más de 83.000 millones asignados a una cantidad que rondará los 22.000 millones, según ha adelantado EL PAÍS. Las cantidades previstas en subvenciones que no hay que devolver se disfrutarán, eso sí, íntegramente.
Hacienda ha intensificado en los últimos meses el control tributario y las regularizaciones sobre las Agrupaciones de Interés Económico (AIE), una figura jurídica desconocida para el gran público pero ampliamente utilizada en sectores como la investigación científica, la producción audiovisual o los espectáculos culturales y en vivo. El motivo de las inspecciones obedece a la proliferación de esquemas que utilizan estas entidades para trasladar créditos fiscales ―pérdidas que se pueden compensar en el momento de pagar impuestos― a empresas e inversores de forma abusiva, inflando artificialmente deducciones y generando rentabilidades desproporcionadas.
La corrupción política vuelve a protagonizar la conversación pública. En los últimos meses, los casos que más espolean esta preocupación ciudadana son los que afectan al PSOE, con sus dos últimos exsecretarios de organización acusados de corrupción. También resuenan los nombres de las empresas presuntamente implicadas, como la constructora Acciona. En este contexto, el Ministerio de Trabajo da impulso a una normativa que interpela a este tipo de situaciones. El departamento que dirige Yolanda Díaz sacó este martes a audiencia pública un anteproyecto de ley que pretende proteger a los empleados en tales empresas, de manera que estén blindados si dan el paso de denunciar prácticas corruptas y tengan la garantía de no ser cesados por ello. Los despido por esta causa se considerarían nulos.
Juan Orlando Hernández (Gracias, Honduras, 58 años) abandonó el lunes la cárcel de alta seguridad de Hazelton, en Virginia Occidental, donde cumplía una pena de 45 años. Hernández, que fue presidente de Honduras entre 2014 y 2022, fue condenado por sus vínculos con el narcotráfico. Y abandona la cárcel gracias a un indulto del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien ha tratado de influir en las elecciones presidenciales del pasado domingo, ofreciendo su apoyo al candidato conservador Nasry Tito Asfura, del mismo partido que Hernández.
Se acabaron los tiempos en los que un escritor latinoamericano, ávido de ser publicado, se mudaba a Barcelona para hacerse un hueco entre las grandes editoriales catalanas. Si se está fraguando un nuevo boom literario, lo más probable es que estalle primero en el continente americano. El empuje de las editoriales independientes latinas y el despliegue de agentes literarios en la región, junto con las traducciones al inglés y el impulso de las ferias han redibujado en un par de décadas el paisaje de la literatura en español. Barcelona mantiene la voz y el peso económico, pero la conversación literaria hace paradas en Ciudad de México, Bogotá, Buenos Aires o Nueva York. “Ya no hay que ir para volver”, resumen Ana Lucía Barros y María José Ojeda, editoras de la colombiana Laguna Libros.
Juan Orlando Hernández (Gracias, Honduras, 58 años) abandonó el lunes la cárcel de alta seguridad de Hazelton, en Virginia Occidental, donde cumplía una pena de 45 años. Hernández, que fue presidente de Honduras entre 2014 y 2022, fue condenado por sus vínculos con el narcotráfico. Y abandona la cárcel gracias a un indulto del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien ha tratado de influir en las elecciones presidenciales del pasado domingo, ofreciendo su apoyo al candidato conservador Nasry Tito Asfura, del mismo partido que Hernández.
En un país tan castigado por la incertidumbre históricamente como Honduras, la democracia necesita algo más que elecciones: confianza. Confianza en que los votos se cuentan con rigor, en que los resultados se respetan y en que ningún actor interno o externo va a torcer la voluntad popular. Las elecciones presidenciales debían servir para reafirmar esa certidumbre. En cambio, han vuelto a poner al país en vilo. El escrutinio avanza voto a voto, con Nasry Asfura y Salvador Nasralla prácticamente empatados, y con ambos campos reivindicando victorias anticipadas que solo contribuyen a elevar aún más la tensión política.
En 1980 se estrenó en los cines de EE UU una película basada en un sketch del triunfante programa de humor Saturday Night Live. Iba de dos hermanos de Chicago que decidían reunir a su banda de blues para recaudar fondos y así salvar el orfanato católico en el que se habían criado. El argumento estaba algo cogido por los pelos —en Estados Unidos las instituciones caritativas, religiosas y educativas están exentas de impuestos y el convento de Santa Elena de la Sábana Santa estaría incluido por los tres motivos— pero en realidad era una excusa para que John Belushi, uno de los protagonistas, diera rienda suelta a su pasión por el blues y apareciese en escena con músicos a los que admiraba.
Cuatro días. El Congreso brasileño tardó solo cuatro días tras el fin de la COP30 en lanzar el mayor ataque contra la Amazonia y todos los biomas. El proyecto de ley apodado “de la Devastación” había sido aprobado en la Cámara de Diputados y en el Senado y, ante la catástrofe, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva había impuesto 63 vetos. La semana pasada, el 27 de noviembre, el Congreso rechazó 56. Así, lo que era proyecto ya es ley, y lo que determina la ahora Ley de la Devastación, en la práctica, es el fin de las licencias ambientales. Es el mayor ataque a la vida que ha acometido el Congreso desde la redemocratización de Brasil. Pero la desprotección que la nueva legislación amplía —y mucho— afecta a todo el planeta, que depende de la selva amazónica para frenar el aumento global de las temperaturas.
Como sucede casi siempre en La Moncloa, una cosa es lo que se ve y otra lo que se mueve por debajo. Mientras todo el foco está puesto en la debilidad parlamentaria del Gobierno y en la crisis de credibilidad del presidente, Pedro Sánchez, porque sus dos ex secretarios de organización del PSOE han pasado por la cárcel, el jefe del Gobierno y su equipo negociador no paran de moverse en la sombra en sentido contrario.
La izquierda extremeña trata de esquivar en campaña el ruido nacional, pero no siempre es fácil. Aunque Unidas por Extremadura aúna oficialmente a Podemos, IU y la ecologista Alianza Verde, Movimiento Sumar —el partido creado por Yolanda Díaz en 2023—, mostró desde el principio su apoyo a la candidatura y ahora reivindica también su presencia en la papeleta.
La peor pandemia animal de la historia, la mortífera peste porcina africana, acaba de entrar en España. El principal sospechoso de la introducción es un hipotético bocadillo de embutido foráneo contaminado por el virus, arrojado a una papelera y devorado por los jabalíes que se alimentan de las basuras humanas en la zona del parque natural de Collserola (Barcelona). Por el momento solo se han confirmado nueve casos en animales silvestres, pero el sector porcino español tiembla con razón. En España hay más cerdos que personas: 49 millones de ciudadanos frente a los 54 millones de gorrinos sacrificados el año pasado. Y el veterinario José Ángel Barasona lanza una advertencia: ni existe una vacuna ni llegará en un futuro próximo. Las autoridades y los ganaderos tendrán que recurrir a las medidas medievales ante una peste: aislar a los enfermos y eliminar sus cadáveres.
Desde mediados del siglo XIX los profesores de instituto díscolos eran enviados lo más lejos posible de Madrid. Badajoz, a cuatrocientos kilómetros de la capital, recibió un número importante de esos docentes krausistas, librepensadores a su manera y muy interesados en las técnicas educativas modernas, hasta llenar el viejo instituto provincial de linternas mágicas, animales naturalizados, mapas de todo el mundo y láminas de biología; lo que para algunos debió vivirse como un destierro fue la oportunidad de otros muchos, que pudieron estudiar a la altura de su tiempo, como en Bruselas, Berlín o París.